domingo, 23 de febrero de 2014

Si viajas a... Certaldo



Certaldo es el pueblo donde nació y murió Boccaccio (1313-1375).  Pertenece a la región de la Toscana y está a muy corta distancia de Florencia y Siena. A Certaldo se retira el autor en 1370 tras las revueltas nobiliarias en las que son decapitados u obligados a exiliarse muchos de sus amigos. Aquí escribirá su misógino Corbaccio y preparará los estudios de la Divina Comedia de Dante que sientan las bases de la crítica dantesca. Boccaccio morirá en Certaldo con el recuerdo de su amigo Petrarca, hacía un año fallecido, y los escritos de Dante entre manos; una unión muy ilustrativa del protagonismo de estos tres florentinos como padres de la literatura moderna italiana, que tanto influirá en el Renacimiento posterior europeo.

La vida y obra de Boccaccio se puede evocar en la casa de Boccaccio y la Iglesia de los Santos Jacobo y Felipe, en donde está enterrado.

Casa de Boccaccio
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Os recomiendo la lectura del artículo de Vargas Llosa, titulado "La casa de Boccaccio" (El País de 23-2-2014).  El Premio Nobel 2010 relata su viaje literario a Certaldo y alrededores, donde sigue las huellas de Boccaccio por la Toscana y evoca sus últimos días en el pueblo natal. 


sábado, 8 de febrero de 2014

Otelo en Sevilla

El pasado jueves vimos Otelo de Shakespeare en el teatro Lope de Vega de Sevilla. La obra está dirigida por Eduardo Vasco y representada por Noviembre Compañía de Teatro. Os gustó mucho, así que os dejo aquí información detallada sobre esta versión y abajo, un vídeo promocional.


                               


Seguiremos analizando en clase algunas pequeñas diferencias con respecto a la obra que habéis leído: alguno de vosotros me comenta que Otelo aquí no muere; que ha desaparecido el personaje de Blanca; que no habéis visto al bufón o que adquiere mucha relevancia el tema de la violencia de género... En cualquier caso, parece que todos estamos de acuerdo en que la obra no ha perdido nada de su esencia y que esta tragedia sigue viva en pleno siglo XXI. Nos ha gustado el vestuario, la inclusión de la música en vivo, la escenografía funcional y, sobre todo, el que se haya mantenido como en tiempos de Shakespeare, el papel preponderante del actor y de la palabra en el escenario.


Puedes leer la tragedia Otelo de Shakespeare, pinchando aquí